¡Ridículo morado!

El lamento morado hizo volver la palabra "crisis" a Tibás. Foto: SMC
El lamento morado hizo volver la palabra “crisis” a Tibás. Foto: SMC

¿Mucha confianza? o ¿Contar los puntos antes de ganarlos?, el Deportivo Saprissa tenía en bandeja de plata la clasificación a la siguiente ronda de la Concacaf Liga de Campeones, pero el Santos Laguna fiel a su estilo de “sacar el dolor ajeno en su casa” humilló a los morados por seis a uno, lo echo del certamen y volvieron los fantasmas de “crisis” a Tibás.

Saprissa ocupaba ganar por cualquier marcador o empatar para estar en los octavos de final, pero nunca se imaginaron que el viaje a México fuera “de muerte lenta”. Los primeros minutos fueron dominados por los visitantes, pero su falta de contundencia les costó caro.

Al 18’ ya cuando Ramírez y Colindres tomaron confianza, Andrés Rentería y Djaniny Tavares dieron varias lecciones de cómo ser contundente en velocidad y espacios reducidos, poco a poco Saprissa sintió en carne propia lo que le esperaba, hasta llegar al punto que Colindres tuvo que bajar a la banda izquierda para cubrir a Calvo y Badilla.

La pesadilla inició al minuto 37 al ritmo de cueca, Bryan Rabello nunca le perdió la vista a Luis Mendoza quien por la izquierda y con caño incluido sacó la marca de Francisco Calvo, centró y el chileno sin marca cabeceó para abrir el marcador.

El partido tomó un giro cuando Rentería se lesionó la pierna derecha tras un tirón en un ataque lagunero, lo sustituyó Nelson Calderón. Un giro que fue peor para los ticos.

En el complemento los morados vieron la luz de esperanza gracias a Mynor Escoe al 48’aplicó el “gol de camerino”, Bustos Golobio hizo un pase de profundad para el “7” sacará la marca de Cesar Ibáñez y la cambió a Marchesin.

A partir del 51’ esa luz que se amparó Sequeira y compañía la borraron los mexicanos, primero Djaniny Tavares en un error de marca de Hansell Arauz y Adolfo Machado en el centro del área, no lo pensó dos veces para descontar.

Tres minutos después Luis Mendoza montó el baile para el tercer gol, se quitó a como le dio la gana a Arauz, Calvo y Carvajal, la fiesta en el Estadio Corona era evidente.

Carlos Izquierdoz de cabeza al 67’ aumentaba el lamento morado bajo la incertidumbre de la falta de marcas en el centro del área, principalmente desde los centros por los costados.

Por si eso no fuera poco un minuto después Diego González vio como Danny Carvajal estaba salido y aquel centro al área chica se convirtió en un tiro colocado para el quinto gol de la noche, la humillación era difícil de explicar, los jugadores no se lo podían creer.

Para poner la cereza al pastel Alonso Escoboza al 90’ aprovechó otro centro por la izquierda en complicidad a un error de Francisco Calvo, remató de media volea y el seis por uno era definitivo.

De esta manera el Deportivo Saprissa le puso punto final a su participación en la Concacaf Liga de Campeones de una manera que muchos no lo van a olvidar tan sencillo y es apenas el principio de la pesadilla morada, una historia que pronto continuará.

Exit mobile version