El Director Técnico de la Selección Nacional de Costa Rica, Óscar Ramírez, analizó el primer duelo de la Hexagonal Mundialista ante Trinidad y Tobago. El entrenador patrio recalcó que aspectos se deben cuidar y, aunque no adelantó nada, dejó claro que la base se mantiene para este cotejo.
Siempre el primer partido es muy complicado por lo que significa; sin embargo, el ‘Machillo’ destacó que sabe cómo jugar este tipo de enfrentamiento ante un rival caribeño. “Tengo que ser inteligente, saber controlar, es un partido de mucha inteligencia y tenemos que tener mucho cuidado con la pérdida del balón, la transición de ellos”, declaró.
Ramírez mencionó cuáles aspectos trabajaron durante los entrenamientos para contrarrestar las virtudes trinitenses. “El arranque el partido es fundamental, la parte emotiva y saber manejar los tiempos. También hay algunos jugadores con transición fuerte y el tema de altura”, indicó.
El timonel Nacional agregó: “Hay una intensión primaria de querer presionar los primeros minutos, en cuanto al partido en sí, la idea es buscar el momento del partido, no podemos salir a lo loco, los muchachos están conscientes, Dios quiera se nos abra rápido”.
El partido se realizará en el estadio Hasely Crawford, el cual tiene una gramilla bastante apta para la práctica del balompié. “Es una gran cancha donde se puede jugar buen fútbol, nos beneficia porque es más complicado por la humedad cuando está acolchada”, dijo Ramírez.
Por otra parte, el estratega tico vivirá su primera Hexagonal y, por eso, expresó que intenta gozar al máximo. “Estoy tratando de disfrutar sabiendo la responsabilidad que implica, trato de ser encuánime para que el jugador sienta tranquilidad”, concluyó.