Con muy poco tiempo en la Primera División, el Club Deportivo Leganés de España se ha ganado el cariño de miles de aficionados al fútbol alrededor del orbe, pero no precisamente por sus destellos dentro de la cancha.
Sino por ingeniosos afiches y pautas comerciales que han hecho reir en más de una ocasión a quienes rondan sus redes sociales a diario para informarse del club. Pero ¿Quiénes están detrás de tan ingenioso marketing?.
Se trata de cinco muchachos de entre 28 y 31 años, todos aficionados al cuadro madrileño y liderados por Daniel Abanda quien se incorporó al club desde el año 2008 en un incómodo sitio como el cuarto de utilería del Estadio Butarque –casa del Leganés-.
“Ahí al menos hay calefacción… Aunque ha tardado menos el Leganés en subir a Primera que nosotros en tener Internet de alta velocidad. Hasta la semana pasada teníamos conexión por satélite, con límite de descargas, como en los pueblos a los que no llega Internet”, bromea Abanda.
Son un departamento de marketing y comunicación que va más allá de esto, ya que han hecho desde reuniones con peñas hasta enumerar con etiquetas cada uno de los asientos del estadio.
“Empezamos en 2008. Yo era becario en una radio y en Europa Press y me ofrecí a llevar la comunicación del Leganés. Desde que el equipo bajó a Segunda B hubo un poco de desconexión con la afición. Nadie sabía nada del Lega y quería volver a generar interés por el equipo. ¿Cómo? Dando vueltas con un coche y un megáfono para anunciar que había partido, actualizando la página web que estaba obsoleta, haciendo una revista y campañas promocionales. Grabábamos vídeos de los partidos, los locutábamos y los colgábamos en YouTube para que la gente viera los resúmenes”, cuenta Abanda.
En esas surgió la idea de hacer unos carteles urbanos para promocionar los partidos del Leganés. “Cómo no salían en los periódicos deportivos, teníamos que llegar a la gente”, explican Víctor y José. “Al principio se trataba de echar un cable, altruismo”, lo define Abanda, “luego empezó a convertirse en un trabajo remunerado”, cuenta.
Sus ideas han ido desde simples carteles que involucran a las mascotas de los rivales o alguna idea loca, pasando por diseñar un escudo con sabor y olor para la camiseta del club hasta realizar la presentación del equipo en un supermercado lleno de pepinos y así hacerle honor a su sobrenombre de ´pepineros´.
“No era fácil conseguir la mezcla perfecta. La épica funcionaba muy bien para el pueblo, para lo que era Leganés, pero nada para la afición rival. La ñoñería funcionaba muy bien con la afición rival pero nada con la ciudad.
Optamos por el humor, que es el que llama a todos. Tiene buena acogida aquí en Leganés y fantástica en los que tienen sentido del humor fuera de aquí” comenta otra de las ´mentes maestras´ detrás de tan exitosas pautas.
Incluso muchos aficionados de otros equipos les han contactado para manifestar su deseo de ver el cartel que le corresponderá a su equipo en el momento que toque enfrentar al cuadro pepinero.
Asi que pronto veremos con que nos deleitan estos ingeniosos muchachos en las redes de un equipo que se ha ganado el corazón de muchos por algo que no involucra un buen fútbol
