El juego no inició en punto como estaba planificado, con la intención de que sus aficionados tuvieran más tiempo de llegar al Nacional ya que no se dio la respuesta esperada por la junta directiva.
Luego de diez minutos de atraso, comenzó el partido con gran intensidad por parte de los rojinegros quienes ya tenían medido a Leonel Moreira con varios remates hasta la minuto diez que Osvaldo Rodríguez de palomita cabeceó para abrir la cuenta en gran centro de Ronald Matarrita.
Minuto 20, Herediano buscó reaccionar para no quedarse atrás y Odir con un planteamiento arriesgado, en centro de José Sánchez desde el costado derecho lo demostró; Jonathan Hansen que estuvo en duda recepcionó el balón se volteó y fulminó al ángulo a Patrick Pemberton.
A cuatro minutos del final de la primera parte, José Guillermo Ortiz no le perdió la vista el error de Gabriel Gómez en un pase de Leonel Moreira, se la quitó al panameño y con amague incluido inclinó la balanza a favor de Liga Deportiva Alajuelense en ese momento.
Para los últimos 45 minutos Jacques se cansó de ver como Alajuelense armó su fiesta en grande en el Estadio Nacional, movió sus fichas y la victoria salió a flote.
Entró Keven Alemán de cambio y al 69’ luego de una serie de ataques rojiamarillos remató cruzado a la derecha y con la celebración al estilo “no los oigo” convirtió al reducto de La Sabana en una olla de presión.
Por si no fuera poco un minuto después Randall Azofeifa dio un golpe en la mesa con su remate de larga distancia, el campeón volvió y con más fuerza con la tercera anotación de los visitantes.
Alajuelense nunca se quedó de brazos cruzados, corrió como si fuera una final, peleó balones y trató hasta lo imposible para rescatar la fiesta, pero el daño ya estaba hecho.