Crónica de una terrible semana

Limón FC tuvo una semana para el olvido. Problemas administrativos, técnicos... Y caen ante el Campeón.

Foto: Prensa Limón FC.

Cuando se viene una, llegan todas. Es una descripción casi que gráfica de lo que fue esta semana en Limón. De una suspensión, un debut negativo, un despido, una denuncia… En fin, vaya semana para los verdes.

Tras una previa prometedora en donde la llegada de Esteban Alvarado, Minor Escoe y compañía, daban un aire de expectativa para los del Atlántico, el panorama se invirtió de forma drástica. Pero mejor vamos repasando por partes lo sucedido, con el fin de llevar un hilo coherente de las cosas.

La Suspensión

Limón fue el único club de los 12 de la Primera División que no pudo arreglar con la Caja Costarricense de Seguro Social, su deuda para poder arrancar el certamen. El juego que correspondía el martes anterior ante Guadalupe en el Colleya Fonseca, no se pudo efectuar a causa de esto. Los puntos por reglamento se adjudicarán el próximo martes a los guadalupanos.

La discordia

La discordia entre Celso Gamboa y Luis Fernando Fallas, según relató el último, se dio por la fiesta que el presidente limonense dio en su apartamento. Fallas sacó a los jugadores envueltos en ella. Gamboa ordenó a Fallas poner a Alvarado, el DT se negó y fue cesado de su cargo. Esto fue parte de la terrible semana que vivió Limón. Foto: Prensa Limón FC.

Para esta tarde, Luis Fernando Fallas dejó su cargo como Director Técnico de Limón. Según decía el ahora extimonel en varios medios que la noche anterior hubo una fiesta a altas horas en el apartamento del Presidente del equipo, Celso Gamboa, en donde estuvieron Esteban Alvarado, Roy Smith y Johnny Gordon. A Fallas no le gustó eso y los sacó de la convocatoria para el debut ante el Campeón Alajuelense.

Esto no fue del agrado de Gamboa quién le ordenó a Fallas alinear a Alvarado como lo indicó Fallas. Como no estuvo de acuerdo, fue despedido, razón por la cual, Ricardo Allen terminó ejerciendo como entrenador de los caribeños.

Debut con el pie izquierdo

Tras este incidente, los limonenses debían enfrentar a la Liga, equipo el cual los derrotó por 0-2 con goles de Alonso Martínez a los diez minutos y Johan Venegas a los 35′ de la primera mitad. Suficiente para dejar en claro el mal momento que está atravesando el conjunto del Caribe costarricense.

El cotejo en sí fue una clara demostración de lo que Agustín Lleida dijo cuando firmó a Venegas de “comprar goles”. Johan ya lleva tres en el certamen y se vió una sociedad muy dinámica e interesante con Marcel Hernández, siendo ellos quienes llevaron el peligro al marco de Alvarado.

El primer gol a los 10′ fue muestra de ello cuando Venegas y Hernández se asociaron con Alonso Martínez para vencer al exflorense.

La dupla Venegas-Hernández ya empezó a carburar y precisamente Limón fue su primera víctima. Hablando de lleno del partido, el Campeón mereció con creces su triunfo en Guápiles. Foto: Prensa LDA.

El 0-2 fue muy similar en donde el exmorado se juntó con el exbrumoso, solo que esta vez Venegas logró batir a Alvarado para cerrar la cuenta.

En el complemento, Marcel lo intentó, pero Alvarado pudo evitar que su marco cayera por tercera vez. Por el caso de Limón, lo intentó de forma aislada con Keyder Bernard, pero resultó infructuoso.

La Liga fue a todas luces justo ganador, mientras que Limón, estando ya en un mal momento, hubo un incidente que lo puso peor.

En investigación

Las declaraciones del extécnico limonense, Luis Fernando Fallas, no dejaron indeferente a nadie, mucho menos a la Unión de Clubes de Fútbol de la Primera División. Tanto así que se va a abrir una investigación por incumplimiento de los protocolos establecidos del COVID-19 por parte de los mencionados por Fallas y en la que el entrenador fue llamado a declarar el próximo lunes a primera hora.

Esta situación podría traer consecuencias incluso de gravedad al conjunto limonense que pasó de tener un “hype” altísimo a vivir en una de sus semanas más complicadas de la historia reciente del club en lo que a toda regla se le puede llamar una crónica de una terrible semana.

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