En una jornada dominical de grandes emociones, brumosos y lecheros no se quedaron atrás en el Fello Meza, pusieron a sus aficionados con los nervios de punta de principio a fin y en tiempo de reposición enterraron cualquier rumor de ver Cartaginés fuera de la siguiente ronda, están a 90 minutos de meterse en la fiesta grande del futbol costarricense.
Cuando un equipo está en la lucha por clasificar a la siguiente ronda, el trabajo en equipo es vital para conseguir el objetivo, es por eso que los brumosos pusieron toda su carne en el asador desde los primeros minutos con Ronchetti, Sánchez, Castillo, Fonseca, Delgado y Johnson, con la media cancha adelantada buscó abrir el marcador pero su rival encontró la clave más rápido.
Mientras los tiros iban y venían, Andrés Castro no le perdió la vista al mal despeje de Fernando Brenes, Alpizar se la pasó a Silva, el argentino la dejó ir y el lechero la recepcionó con la pierna izquierda, se la cambió a la derecha, remató colocado al palo izquierdo de Gómez y puso a temblar al banquillo cartaginés al minuto 40.
La presión lejos de disminuir, aumentó. Cesar Eduardo Méndez aumentó el ritmo adelantando aún más la media cancha concretando buenos resultados, cuatro minutos después Danny Fonseca centró al área pequeña, Carlos Johnson sacó ventaja de su estatura y cabeceó sin marca para empatar el marcador, Méndez miró su reloj y su expresión de angustia desapareció.
Para el complemento las cosas para Cartaginés se le pusieron cuesta arriba, poco a poco sus chances de clasificar se estaban alejando y conforme pasaron los minutos Méndez volvió a desesperarse, esto se reflejó en su planteamiento.
Pero tampoco Cardetti se la puso tan sencilla como muchos esperaban, la buena estructura en defensa y los despejes a los costados fueron sus candados, además con el buen momento del meta Drummond en varias ocasiones los gritos de “uuu” y “uuyyy” en las gradas fueron más evidentes.
El momento de alegría llegó al 67’, volvió su capitán a las canchas después de salir en camilla ante el Deportivo Saprissa, Randall Brenes entró con el objetivo de sacar la victoria a como dé lugar y lo consiguió en el mejor momento.
La presión siguió por parte del equipo de la Vieja Metrópoli y las lesiones musculares en el Club Sport Uruguay se convirtieron en uno de los aspectos más relevantes del segundo tiempo para bajar las revoluciones a un Cartaginés que tenía sangre en el ojo.
El sufrimiento y los nervios del gol deseado llegaron a su fin al minuto 90+5 con 15 segundos, tercer tiro de esquina consecutivo para la Vieja Metrópoli, centró de Mauricio Castillo, cabeceó Ronchetti y cuando la pelota iba a salir el “Chiqui” Brenes la desvió para poner de locos a toda la provincia.
La polémica también se hizo presente porque los de Coronado reclamaron un fuera de juego del rival en el gol del cual no existió y en un duelo de palabras Danny Fonseca y Alejandro Alpizar fueron expulsado. Con esta victoria el Club Sport Cartaginés tendrá 90 minutos para regresarle la fe a sus seguidores con una nueva semifinal o verlas desde el televisor.
